Cómo usar Mullvad Browser, el navegador más privado del mundo, paso a paso

La privacidad online se ha convertido en un bien escaso en un entorno donde gobiernos, grandes tecnológicas y empresas de publicidad rastrean prácticamente cada clic que hacemos. Frente a esta realidad, Mullvad ha decidido ir un paso más allá y, junto a su VPN, ofrece un navegador propio pensado para minimizar al máximo el rastreo y la creación de huellas digitales del usuario: Mullvad Browser.

Este navegador nace de la colaboración entre Tor Project y Mullvad VPN y está diseñado para quienes quieren navegar con el menor rastro posible, pero sin depender de la red Tor. Su planteamiento es claro: combinar un navegador endurecido contra el rastreo con una VPN de confianza para hacer mucho más difícil que terceros asocien tu actividad con tu identidad real.

Qué es Mullvad Browser y por qué se ha creado

Mullvad Browser es un navegador gratuito y de código abierto desarrollado por el equipo del Proyecto Tor y distribuido por Mullvad VPN. Se lanzó oficialmente el 3 de abril de 2023 y comparte muchos de los mecanismos de defensa del Tor Browser, pero con una diferencia clave: está pensado para usarse con una VPN (como Mullvad VPN) en lugar de con la red Tor.

El objetivo principal del navegador es reducir al máximo el rastreo, la vigilancia masiva y la censura. Lo hace atacando uno de los puntos débiles habituales de la privacidad: las técnicas de fingerprinting o huella digital, que combinan parámetros del dispositivo (fuentes instaladas, tamaño de pantalla, APIs de hardware, renderizado de contenido, etc.) para identificarte aunque cambies de IP o borres las cookies.

Según Mullvad y el Proyecto Tor, el navegador se ha diseñado para homogeneizar el comportamiento y la configuración de los usuarios, de forma que tu navegador se parezca lo máximo posible al del resto. Cuanto menos único resultes desde el punto de vista técnico, más complicado es para terceros asociar tu actividad con tu perfil.

 

La filosofía que hay detrás es la misma que inspira a Mullvad VPN: defender una red libre de vigilancia masiva y mercados de datos, donde tu información personal no se convierta en un producto que cualquiera pueda comprar, ni en una fuente constante de control por parte de Estados y empresas.

Privacidad por defecto: qué protege Mullvad Browser

 

Una de las claves de Mullvad Browser es que viene con configuraciones de privacidad agresivas ya activadas, pensadas para que el usuario no tenga que pelearse con mil menús para estar relativamente protegido desde el primer minuto.

Para empezar, el navegador está configurado para funcionar en modo incógnito permanente. Esto significa que, por defecto, no conserva tu historial de navegación como lo haría un navegador convencional y, al cerrar la sesión, se minimiza la cantidad de rastros locales que quedan guardados en tu dispositivo.

Además, Mullvad Browser bloquea automáticamente rastreadores y cookies de terceros. Esto dificulta que las redes publicitarias y los grandes actores de tracking sigan tus movimientos de web en web usando cookies o elementos incrustados como píxeles de seguimiento y scripts externos.

Otro frente importante es la lucha contra la huella digital. El navegador incorpora ajustes y parches específicos para disimular parámetros del sistema que suelen usarse para identificarte: el conjunto de fuentes disponibles, detalles de cómo se renderizan las páginas, información devuelta por APIs de audio, vídeo o gráficos, e incluso datos de dispositivos conectados.

Mullvad VPN: el compañero ideal del navegador

El navegador está pensado para usarse junto con Mullvad VPN, una red privada virtual centrada en la privacidad y con un enfoque muy particular respecto a los datos de sus usuarios.

Uno de los rasgos más llamativos de este servicio es su sistema de cuentas: no se solicita correo electrónico ni datos personales en el registro. En su lugar, se genera de forma aleatoria un número de cuenta de 16 dígitos que sirve como identificador único y credencial de inicio de sesión.

En cuanto a pago, Mullvad permite métodos anónimos como efectivo enviado por correo y criptomonedas (Bitcoin, Bitcoin Cash y Monero), además de opciones tradicionales como tarjeta, transferencia bancaria, PayPal o Swish. En 2022 eliminaron las suscripciones recurrentes precisamente para almacenar todavía menos datos vinculados a los usuarios.

A nivel técnico, el servicio utiliza cifrado fuerte de tipo AES-256-GCM, certificados RSA de 4096 bits con SHA-512 para autenticar los servidores, y aplica confidencialidad directa perfecta, lo que hace más difícil descifrar sesiones pasadas incluso si en el futuro se comprometiera una clave.

También integra protecciones frente a fugas de DNS e IPv6, así como varias opciones de ofuscación para esquivar bloqueos de VPN en redes corporativas o bajo censura estatal. Además, ofrece redirección de puertos para usuarios avanzados que la necesiten.

Un navegador hecho para luchar contra la vigilancia masiva

Mullvad plantea sus productos como una contribución a la defensa de una sociedad libre donde la privacidad sea un derecho real. En su visión, una infraestructura digital que registre todos tus movimientos, conexiones y hábitos es una amenaza directa para las libertades civiles.

La combinación de Mullvad VPN y Mullvad Browser busca reducir drásticamente la cantidad de información que terceros pueden recopilar sobre ti: por un lado, tu IP y tu ubicación se ocultan tras los servidores de la VPN; por otro, el navegador limita el rastreo mediante cookies, scripts y huellas digitales.

El mensaje de la compañía es claro: una Internet libre es aquella sin vigilancia masiva, sin censura sistemática y sin mercados de datos en los que tu vida online se comercialice sin tu control. Mantener la anonimidad razonable en la red no es solo una cuestión de comodidad, sino una pieza básica de una sociedad democrática abierta.

Usar un VPN fiable como Mullvad ya es un gran paso; si se combina con Mullvad Browser, se refuerza el bloqueo de cookies de terceros y tecnologías de seguimiento más sofisticadas, dificultando que anunciantes y data brokers construyan perfiles precisos de tus hábitos.

Cómo funciona Mullvad VPN y por qué encaja con Mullvad Browser

Cuando activas Mullvad VPN, tu tráfico sale de tu dispositivo a través de un túnel cifrado hacia uno de sus servidores VPN. Desde ahí continúa hacia la web o servicio al que quieras acceder. La web que visitas solo ve la IP del servidor de Mullvad, no la tuya real.

Tu proveedor de Internet también queda limitado: puede ver que estás conectado a Mullvad, pero no qué webs visitas, qué contenido consumes ni qué servicios utilizas. Esto corta una de las vías clásicas de monitorización y recopilación de datos por parte de operadoras y terceros que compran o piden esos registros.

De cara a las webs y a los trackers que estas integran, tu IP pública deja de ser un identificador fiable, especialmente si se combina con un navegador que reduce al mínimo la exposición de datos únicos del dispositivo. Es justo ahí donde entra en escena Mullvad Browser, que endurece la capa del navegador frente al rastreo.

Mullvad VPN utiliza sobre todo el protocolo WireGuard, conocido por su eficiencia y rapidez, algo que ayuda a mantener buenas velocidades sin destrozar la batería en dispositivos móviles. WireGuard se ha convertido en un estándar de facto en muchos servicios modernos precisamente por ese equilibrio entre seguridad y rendimiento.

En comparativas recientes, se reconoce a Mullvad por su fuerte compromiso con la privacidad y su transparencia, aunque también se señala que otros proveedores como NordVPN ofrecen redes de servidores más amplias y un catálogo mayor de funciones adicionales. Aun así, muchos analistas siguen destacando a Mullvad como una de las mejores opciones para quienes priorizan el anonimato y la simplicidad.

Instalar Mullvad Browser en Windows paso a paso

En Windows, Mullvad Browser se instala mediante un archivo ejecutable (.exe) que se descarga desde la página oficial de Mullvad. Una vez descargado, basta con hacer doble clic para iniciar el asistente de instalación.

Durante el proceso, el instalador te pedirá que escojas el tipo de instalación: Estándar o Avanzada. La opción Estándar es la recomendada, ya que coloca el navegador dentro de tu carpeta de usuario y facilita tanto las actualizaciones como las futuras desinstalaciones.

Si eliges la instalación Avanzada, puedes activar el modo de instalación portátil (Standalone), que sitúa el navegador en una carpeta en el Escritorio, similar a versiones anteriores que no modificaban apenas el sistema. Eso sí, Mullvad recomienda no cambiar la ruta de instalación por defecto hacia ubicaciones como «C:\\Program Files», porque podrían aparecer errores a la hora de actualizar o desinstalar.

Para entornos donde se necesitan despliegues silenciosos, es posible añadir el parámetro «/S» al ejecutable para realizar una instalación sin cuadros de diálogo, algo útil en empresas o scripts automatizados.

Una vez instalado en modo Estándar, puedes abrir Mullvad Browser mediante el acceso directo del Escritorio o desde el Menú Inicio. En el caso de la instalación Standalone, el acceso directo estará dentro de la carpeta «Mullvad Browser» que se crea en el Escritorio.

 

Gestionar Mullvad Browser como navegador predeterminado y desinstalación en Windows

En Windows solo es posible establecer Mullvad Browser como navegador predeterminado si se ha elegido la instalación Estándar. Para configurarlo, puedes buscar «Aplicaciones predeterminadas» en el menú Inicio y, dentro de esa sección de ajustes, seleccionar Mullvad Browser en la parte de navegador web.

Si necesitas una guía más detallada, Mullvad sugiere seguir las instrucciones que Mozilla ofrece para Firefox como navegador predeterminado, sustituyendo simplemente Firefox por Mullvad Browser en cada paso.

Al desinstalarlo en modo Estándar, el programa no elimina automáticamente tus carpetas de perfil (bookmarks, ajustes, etc.). Si quieres borrarlas, tienes que anotarte su ubicación antes de desinstalar. Puedes hacerlo entrando en about:profiles, localizando el perfil que indica que está en uso y abriendo las carpetas asociadas mediante los botones «Open Folder».

Si deseas conservar marcadores y preferencias, no borres esos directorios. Si, en cambio, quieres dejar el sistema totalmente limpio, podrás eliminar dichos directorios a mano una vez que hayas desinstalado el navegador desde «Agregar o quitar programas» o desde el propio acceso del menú Inicio, haciendo clic derecho y eligiendo Desinstalar.

En el caso de instalaciones Standalone, no hay desinstalador como tal. El perfil de usuario está contenido dentro de la propia carpeta del programa, así que basta con cerrar el navegador, borrar la carpeta «Mullvad Browser» del Escritorio y vaciar la Papelera para retirarlo por completo.

Instalación y gestión de Mullvad Browser en macOS

En macOS el proceso es el típico de muchas aplicaciones: primero descargas el archivo .dmg desde la página de Mullvad, lo abres con doble clic y arrastras el icono de Mullvad Browser a la carpeta Aplicaciones en la ventana que aparece.

Una vez copiado, el navegador puede abrirse desde el Launchpad o directamente desde la carpeta Aplicaciones. Es un flujo muy familiar para cualquier usuario de Mac, sin pasos raros ni configuraciones exóticas.

Para fijarlo como navegador predeterminado en macOS, tienes que abrir Mullvad Browser, ir al menú de la esquina superior derecha y entrar en Ajustes. Dentro de la sección General encontrarás el botón «Hacer predeterminado» y, al pulsarlo, el sistema te preguntará si quieres usar Mullvad Browser como navegador principal; basta con aceptar.

Si en algún momento decides eliminarlo, el proceso de desinstalación pasa por salir completamente del navegador (archivo → Salir o comando + Q), abrir la carpeta Aplicaciones, hacer clic derecho sobre Mullvad Browser y elegir «Mover a la papelera».

Para borrar también los datos de usuario, debes acudir a ~/Library/Application Support, localizar la carpeta MullvadBrowser y enviarla igualmente a la papelera. Al final, solo tienes que vaciar la papelera del Dock para que desaparezcan tanto la app como su información asociada.

Mullvad Browser en Linux: instalación con y sin repositorio

En Linux, Mullvad ofrece dos vías principales para instalar el navegador: mediante repositorio oficial o con descarga directa. Para usuarios de Ubuntu, Debian y Fedora, la opción recomendada es usar el repositorio de Mullvad, lo que facilita las actualizaciones y, en algunos casos, añade capas adicionales de seguridad.

En sistemas basados en Debian o Ubuntu, el primer paso suele ser instalar curl (no en versión Snap), descargar la clave del repositorio y añadir la entrada correspondiente al archivo de fuentes de APT. Tras actualizar los índices con sudo apt update, se puede instalar el paquete mullvad-browser desde los repositorios recién añadidos.

En Fedora, la configuración pasa por emplear dnf config-manager para agregar el repositorio de Mullvad. En versiones recientes, se usa la opción --from-repofile con la URL del archivo .repo, mientras que en versiones anteriores se recurre a --add-repo con la misma dirección. Una vez añadido, basta con un sudo dnf install mullvad-browser.

Si tu distribución no está soportada de forma directa, puedes optar por la instalación sin repositorio. Esto implica descargar un archivo .tar.xz desde la página oficial (o con un comando wget apuntando a la última versión para Linux x86_64) y extraerlo manualmente en tu carpeta de Descargas u otra de tu elección.

La descompresión puede hacerse desde la terminal con tar o a través del entorno gráfico (GNOME, por ejemplo) haciendo clic derecho sobre el archivo y usando las opciones «Extraer aquí» o similares. Después, tendrás una carpeta «mullvad-browser» desde la que podrás lanzar directamente el navegador.

La app Mullvad VPN y su relación con Mullvad Browser

Mullvad ofrece aplicaciones VPN propias para Windows, macOS, Linux, iOS y Android, además de permitir configuraciones manuales con WireGuard y OpenVPN para quien prefiera usar clientes oficiales de estos protocolos. Esto permite una integración fluida con Mullvad Browser en casi cualquier dispositivo.

En Android, por ejemplo, Mullvad distribuye una app que usa WireGuard como protocolo principal para conectarse rápidamente y con poco consumo de batería. Desde ahí, puedes proteger el tráfico del móvil y luego usar navegadores endurecidos frente al rastreo, como Mullvad Browser en escritorio o, en su defecto, configuraciones similares en móviles.

La app incorpora una telemetría muy limitada, diseñada para no vincularse con tu número de cuenta, IP u otro dato identificable. Los registros de la aplicación nunca se envían automáticamente: solo salen del dispositivo si el usuario decide compartirlos explícitamente con el soporte técnico.

El sistema también realiza comprobaciones de versión cada 24 horas, únicamente para saber si hay una actualización disponible y si la versión en uso sigue siendo compatible. En ningún momento estas comprobaciones se usan como vector para rastrear la actividad de los usuarios.

Cuando se usa la función de división de túnel (split tunneling), la app puede leer la lista de aplicaciones instaladas en el dispositivo para permitirte decidir qué tráfico pasa por la VPN y cuál no. Esa lista solo se consulta dentro de la vista de configuración de split tunneling y nunca se envía desde el dispositivo a los servidores de Mullvad.

En conjunto, la estrategia de Mullvad consiste en minimizar los datos almacenados y procesados tanto en el servicio VPN como en las apps cliente, reforzando esa política con un navegador que, por diseño, pretende dejar la menor huella posible en la web.

Quien decide apoyarse en Mullvad Browser junto con Mullvad VPN da un paso importante hacia una navegación más anónima, reduciendo el rastro técnico y comercial que suele dejar la vida digital cotidiana, sin tener que renunciar por completo a la comodidad y velocidad de un navegador convencional bien mantenido.