La noticia de que las actualizaciones de soporte de Microsoft para Windows 10 van a cesar definitivamente en 2025 ha provocado que muchos usuarios se hayan decidido a dar el salto a la última versión del sistema operativo. Si tú te cuentas entre ellos, te interesará saber cómo preparar tu PC para actualizar a Windows 11. Sigue leyendo y lo sabrás.
Por mucho que numerosos usuarios lo han ido postergando, ese día tenía que llegar. Conocemos la fecha límite: el 14 de octubre de 2025. Para entonces, más nos vale a todos habernos mudado a Windows 11. Bien pensado, no es una mala idea, pues gracias a las últimas actualizaciones, esta versión está funcionando mejor que nunca.
Windows 11: requisitos mínimos
Ya que hay que hacerlo, hagámoslo bien. La razón por la cual muchos usuarios de Windows 10 no pudieron pasarse a Windows 11 fue porque su PC no alcanzaba los requisitos mínimos exigidos (así es como surgieron alternativas curiosas como la de Windows 11 Tiny).
El hecho es que esos requisitos siguen siendo los mismos y representan un obstáculo importante en muchos casos. Esto es lo que debe tener un ordenador para poder actualizar a Windows 11:
- Un procesador de 1 GHz o superior, con 2 o más núcleos.
- Al menos, 4 GB de RAM (preferiblemente más).
- Mínimo 64 GB de almacenamiento.
- Gráficos compatibles con DirectX 12 o posterior.
- TPM 2.0 habilitado.
- UEFI que incluya arranque seguro habilitado.
Así que, como es lógico, esto es lo primero que debemos hacer para actualizar a Windows 11: verificar que nuestro equipo cumple con las exigencias de esta lista. Para estar completamente seguros, es recomendable usar herramientas como PC Health Check de Microsoft, cuyos resultados son cien por cien fiables.
Actualizar a Windows 11
Una vez que hemos comprobado que nuestro PC cuenta con los elementos y capacidades necesarias para poder instalar la nueva versión del sistema operativo, estos son los pasos que debemos seguir para completar el salto a Windows 11.
Antes de empezar: hacer una copia de seguridad
Paso previo de importancia capital. Antes de iniciar el proceso, en previsión de que la actualización a Windows 11 pueda no salir bien al primer intento, es necesario realizar una copia de seguridad completa de todos nuestros archivos y configuraciones, guardándolas en una unidad de memoria externa o bien en la nube.
Pasos previos antes de iniciar la instalación
Con los requisitos cumplidos y la copia de seguridad realizada, ya podemos focalizarnos en el método a seguir para actualizar Windows 11, no sin antes haber realizado algunas acciones necesarias:
- Actualizar todos los controladores, para lo cual podemos usar la práctica herramienta Windows Update.
- Desactivar el antivirus, ya que este puede interferir con el proceso de actualización.
- Comprobar que nuestras aplicaciones y programas son compatibles con Windows 11. De no ser así, no funcionarán después de la transición y habrá que buscar alternativas.
- Disponer de una conexión a internet estable, imprescindible para que la instalación no se interrumpa.
Descarga de Windows 11
Si se cumplen las condiciones mínimas y hemos realizado los pasos previos de manera correcta, ya podemos pasar a la fase de actualizar a Windows 11 propiamente dicha. Desde nuestro PC, tenemos que hacer lo siguiente:
- Para empezar, abrimos el menú de Configuración.
- Después vamos a la sección «Actualización y seguridad», donde hacemos clic en Windows Update.
- Si todo es correcto, allí veremos la opción de actualización a Windows 11. Solo tenemos que hacer clic sobre ella y seleccionar la opción «Descargar e instalar».
Luego se trata simplemente de seguir las instrucciones que van apareciendo en pantalla. Hay que tener en cuenta que este proceso puede tardar bastante, dependiendo de las características técnicas de nuestro PC y de la velocidad de nuestra conexión a Internet.
Razones para actualizar a Windows 11
Además de la razón básica (la inminente «desactualización» de Windows 10), hay muchos motivos por los cuales pasarse a la última versión del sistema operativo de Microsoft. Actualizar a Windows 11 es una excelente idea. Entre las más importantes, cabe destacar las siguientes:
- Una interfaz con diseño más moderno, con bordes redondeados y el menú de inicio centrado.
- Mejoras en el rendimiento general del sistema, sobre todo en aspectos concretos como la multitarea y la productividad.
- Soporte para aplicaciones Android.
- Mejoras en la seguridad, con una mayor protección frente al malware y los ciberataques.
Tomando en consideración todas estas ventajas, no parece que vaya a haber un gran debate sobre la conveniencia o no de abandonar Windows 10 y abrirle nuestras puertas a Windows 11. Siempre que nuestro PC sea compatible, saldremos ganando mucho en cuanto a productividad y seguridad (más allá de la cuestión estética, que siempre puede ser opinable).
El verdadero problema se presenta para aquellos usuarios que no disponen de un equipo que cumpla con los requisitos. Para estos casos, las opciones no son muchas. Podemos, por ejemplo, optar a versiones limitadas (como Tiny 11) o directamente tomar la decisión de comprar un equipo nuevo perfectamente preparado para actualizar a Windows 11.
Redactor especializado en temas de tecnología e internet con más de diez años de experiencia en diferentes medios digitales. He trabajado como editor y creador de contenidos para empresas de comercio electrónico, comunicación, marketing online y publicidad. También he escrito en webs de economía, finanzas y otros sectores. Mi trabajo es también mi pasión. Ahora, a través de mis artículos en Tecnobits, intento explorar todas las novedades y nuevas oportunidades que el mundo de la tecnología nos ofrece día a día para mejorar nuestras vidas.