- DirectStorage transfiere datos del SSD a la GPU sin cargar la CPU
- Requiere Windows 11 y SSD NVMe para aprovechar al máximo su potencial
- Reduce tiempos de carga y mejora el rendimiento en juegos modernos
- Permite mundos más complejos y transiciones fluidas gracias a su arquitectura

El avance de las tecnologías de almacenamiento ha transformado la experiencia de juego en PC. DirectStorage es una pieza clave de esa evolución, desarrollada por Microsoft con el objetivo de redefinir la manera en que se gestionan los datos en los videojuegos más exigentes. Su impacto es profundo tanto para los jugadores como para los desarrolladores, especialmente en el ecosistema de Windows 11.
La historia de DirectStorage está ligada a las consolas Xbox Series X|S, donde nació como una solución para aprovechar al máximo los SSD NVMe de alto rendimiento, y que más tarde fue llevada al entorno de Windows para mejorar tiempos de carga, rendimiento gráfico y eficiencia del sistema. Ahora que esta funcionalidad está integrada en Windows 11 y también compatible parcialmente con Windows 10, es el momento perfecto para comprender a fondo cómo funciona, qué beneficios ofrece y qué necesitas para poder utilizarla.
¿Qué es exactamente DirectStorage?
DirectStorage es una API desarrollada por Microsoft que forma parte del conjunto de tecnologías de DirectX 12 Ultimate. Su función principal es permitir una transferencia de datos más eficiente desde el disco duro al sistema gráfico, eliminando la necesidad de que la CPU intervenga en el proceso de descompresión y gestión de esos datos.
En un flujo tradicional de carga de datos, el juego tomaba los archivos comprimidos del disco, los enviaba a la RAM y luego la CPU se encargaba de descomprimirlos antes de que llegaran finalmente a la VRAM de la tarjeta gráfica. Este proceso genera cuellos de botella, especialmente cuando hablamos de videojuegos cada vez más detallados y con mundos más complejos. DirectStorage elimina estos pasos intermedios, con lo que reduce drásticamente los tiempos de carga. Si necesitas optimizar tu sistema, podrías encontrar útil la guía sobre cómo mejorar la velocidad de tu ordenador.
La clave está en que la GPU, a través de sus unidades DMA (acceso directo a memoria), se encarga directamente de leer y descomprimir los datos comprimidos desde el SSD. Este procedimiento, heredado del diseño de Xbox, permite que elementos como texturas, mapas, geometría y modelos lleguen más rápido a la GPU, sin sobrecargar a la CPU.
Cómo funciona esta tecnología en detalle
DirectStorage utiliza una técnica conocida como Workload Decomposition, que reparte las cargas de trabajo, tradicionalmente asumidas por la CPU, hacia el hardware más adecuado, en este caso, la GPU. Todo esto ocurre de manera asíncrona gracias a la arquitectura de DirectX 12, utilizando Compute Shaders que procesan estas tareas en paralelo a la generación de gráficos.
El proceso sigue esta secuencia optimizada:
- El SSD NVMe guarda los datos comprimidos del juego.
- DirectStorage ordena la transferencia de esos datos directamente a la GPU.
- La GPU descomprime los archivos usando su hardware especializado sin intervención de la CPU.
- Los datos ya descomprimidos se utilizan directamente para el renderizado final del juego.
Este enfoque permite que las tarjetas gráficas trabajen con mayor eficiencia, al recibir los datos más rápidamente sin esperas, y que la CPU se libere para manejar otras tareas del sistema o del juego.
Requisitos técnicos para usar DirectStorage
Para aprovechar DirectStorage en un PC, necesitas asegurarte de que tu equipo cumpla con una serie de condiciones técnicas. A continuación, te indicamos qué debes tener:
- Sistema operativo: Windows 11 es la mejor opción, aunque también se admite en Windows 10 versión 1909 o superior, aunque con menor rendimiento.
- Unidad de almacenamiento compatible: se requiere un SSD NVMe conectado a través de PCIe. Estas unidades permiten una tasa de transferencia de datos mucho mayor que los discos SATA convencionales.
- Tarjeta gráfica adecuada: se necesita soporte para DirectX 12 y Shader Model 6.0. En NVIDIA, eso significa tener al menos una RTX 2000 o superior (incluidas las series RTX 30 y 40). En AMD, se requiere como mínimo una Radeon RX 6000. Las Intel ARC también son compatibles.
Además, Microsoft ha añadido una funcionalidad en la barra de juegos de Windows 11 para verificar si tu equipo es compatible. Si ves la indicación “optimized” en las unidades y GPU, significa que tu sistema puede aprovechar DirectStorage.
¿Qué ventajas ofrece DirectStorage en los videojuegos?
La principal promesa de esta tecnología es la de cargar los mundos de juego de forma casi instantánea, pero sus beneficios van mucho más allá:
- Reducción de tiempos de carga: al eliminar la necesidad de pasar por la CPU y RAM, los juegos pueden cargar escenas, niveles y assets en fracciones de segundo. En el caso de juegos como Forspoken, se ha documentado que los tiempos de carga se reducen a menos de un segundo.
- Más fluidez durante el juego: al eliminar los cuellos de botella, se evita la aparición de glitches, saltos (judders) o zonas del escenario que aparecen de golpe (pop-in). Esto es especialmente útil en mundos abiertos o títulos con altas exigencias gráficas. Si deseas información sobre la configuración de almacenamiento, puedes consultar la configuración de almacenamiento en Windows 11.
- Mayor complejidad visual: los desarrolladores pueden incluir texturas de mayor resolución, mapas más complejos y transiciones más suaves entre zonas sin que el jugador experimente caídas de rendimiento.
- Mejor aprovechamiento del hardware: libera recursos de la CPU que ahora pueden utilizarse para IA, física o lógica del juego, mientras que la GPU se encarga de la carga y descompresión de assets gráficos.
La importancia del GDeflate en DirectStorage 1.1
Con la versión 1.1 de DirectStorage, Microsoft integró el soporte para GDeflate, una variante del clásico algoritmo DEFLATE de compresión. ¿Por qué esto importa para los videojuegos? Porque permite comprimir aún más los datos del juego, sin comprometer la velocidad de acceso.
Anteriormente, descomprimir varios GB de datos por segundo era una carga que podía saturar incluso las CPUs más potentes. Pero ahora, gracias a las capacidades de descompresión directamente en la GPU, todo ese peso desaparece del procesador central, acelerando todo el proceso. Para quienes usan consolas, aquí hay una guía sobre cómo mejorar la velocidad de Xbox o PlayStation 4.
Esto se traduce en:
- Cargas más rápidas desde el SSD, ya que la información va comprimida y ocupa menos espacio.
- Instalaciones de juegos más pequeñas, al aprovechar mejor el espacio en disco.
- Desbloqueo de nuevos diseños de niveles, liberando barreras técnicas previas debido a las limitaciones de carga.
Cómo afecta al diseño de los juegos en PC
En consolas Xbox, el sistema unificado de memoria facilita el uso de DirectStorage. PC, sin embargo, mantiene la distinción entre RAM y VRAM. Aun así, gracias al uso inteligente de la RAM como búfer temporal por parte de muchos motores gráficos, se puede lograr un streaming de datos eficiente.
Esto abre puertas a nuevas formas de diseñar entornos, gracias al uso de megatexturas o atlas de textura que permiten cargar solo lo necesario en cada momento. Los entornos pueden cambiar sin necesidad de cinemáticas de carga, y la transición de una zona a otra puede volverse imperceptible.
Aunque este tipo de técnicas no es nueva, DirectStorage facilita su implementación con mejores tiempos de carga y una latencia mucho menor al acceder a texturas o modelos desde el disco.
Estado actual y futuro de la tecnología
A día de hoy, el número de juegos que realmente utilizan DirectStorage de forma activa es limitado. Forspoken ha sido el primer gran ejemplo, pero se espera que en los próximos años más títulos adopten esta tecnología, especialmente conforme se popularicen los SSD NVMe.
Microsoft ya ha entregado las herramientas necesarias a los desarrolladores para empezar a integrarlo en sus motores gráficos y juegos. A medida que esto ocurra, veremos una mejora significativa en la forma en que se sienten los videojuegos en PC, especialmente en aquellos de mundo abierto o con alto contenido gráfico.
Contar con un equipo compatible asegura estar preparado para el cambio que se avecina. Desde cargas instantáneas hasta mundos más ricos y detallados, DirectStorage ha llegado para quedarse y transformará la forma en que jugamos.
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