Qué hacer si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos de Windows 10

¿Acabas de conectar un disco duro al ordenador y este no es capaz de reconocerlo? Esto puede ser muy frustrante, es especial si necesitas acceder a datos urgentes o configurar un dispositivo nuevo. En esta entrada vamos a ver qué hacer si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos de Windows 10.

Detrás de un disco duro invisible puede haber muchas causas, como problemas en las conexiones físicas o fallas en la configuración de la unidad. Sea por lo que sea, la unidad de almacenamiento brilla por su ausencia y no das con ella desde el Explorador de archivos. Afortunadamente, en la mayoría de los casos es posible recuperar el acceso al disco duro aplicando una solución sencilla. Veamos cómo.

Qué hacer si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos de Windows 10

Cuando el disco duro no aparece en el Explorador de archivos de Windows 10, no se tiene acceso a los datos contenidos en él. Este problema es más común de lo que crees, y puede presentarse en equipos con Windows, Linux y macOS. También afecta a cualquier unidad de almacenamiento, ya sea un disco duro, un disco SSD o incluso una unidad extraíble.

¿A qué se debe que el disco duro permanezca invisible? Es poco probable, pero quizá haya una mala conexión física entre el disco y el ordenador. O tal vez el disco no está formateado, o tiene asignada una letra que ya está en uso en el ordenador. En otros casos, Windows necesita actualizar los controladores del disco recién instalado para poder reconocerlo o reparar errores en el sistema de archivos antes de acceder a estos.

Verifica las conexiones físicas

Antes de entrar en pánico, haces bien en empezar por lo básico: verificar las conexiones físicas. No es habitual, pero en ocasiones el problema radica en un cable flojo o un puerto USB defectuoso que imposibilita el acceso a la unidad.

Si estás intentando conectar un disco duro externo al ordenador, asegúrate de que el cable USB esté bien conectado tanto al disco como al puerto del equipo. Además, comprueba que la fuente de alimentación externa del disco (si la hay) esté enchufada y encendida.

En caso de que sea un disco duro interno el que permanece invisible, tendrás que apagar el equipo y abrir la carcasa para revisar las conexiones. Mira el estado de los cables SATA y de alimentación y, si es posible, prueba el disco en otro conector para descartar.

Usa la herramienta de Administración de Discos

Si queda claro que el problema no está en las conexiones físicas, vamos a la configuración del disco para hallar una solución. Si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos de Windows 10, puedes valerte de la herramienta Administración de Discos para intentar hallarlo y configurarlo. Esta herramienta muestra todos los dispositivos de almacenamiento conectados, incluso si no tienen una letra de unidad asignada o no están formateados.

Para abrir la herramienta, presiona las teclas Windows + X y selecciona Administración de Disco. Se abrirá una ventana con el listado de unidades de almacenamiento instaladas. Busca tu disco allí, que debe aparecer bajo alguna de las siguientes tres categorías:

• No inicializado, si es nuevo y nunca se ha configurado.
• Sin asignar, si no tiene ninguna partición.
• Sin letra de unidad, cuando Windows no le asigna una letra (E:, D:, etc.) automáticamente.

Si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos pero sí en la Administración de Discos, puedes respirar tranquilo. Ahora solo tienes que aplicar algunos ajustes para que también sea visible en el Explorador de archivos. Los ajustes a aplicar dependerá de la categoría en la que se encuentre:

• Si el disco es nuevo, haz clic derecho sobre él y selecciona Inicializar disco. Ahora elige el estilo de la partición, que puede ser MBR (compatible con sistemas antiguos) o GPT (recomendado para discos grandes y sistemas UEFI).
• Si el disco muestra espacio sin asignar, haz clic derecho sobre él y selecciona Nuevo volumen simple. Con esto lo que harás será formatear el disco y dejarlo listo para usarlo. Sigue el asistente de formateo y considera usar el formato NTFS, que es la opción estándar para Windows.
• El disco no aparece en el explorador de archivos cuando no tiene una letra de unidad asignada. Si ese es el caso, haz clic derecho sobre la partición y elige la opción Cambiar letra y rutas de unidad. Después, asigna una letra no utilizada y listo.

Actualiza controladores si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos

Si no ves tu disco duro en la Administración de Discos o no puedes inicializarlo, formatearlo o asignarle una letra, tal vez debas actualizar los controladores del disco como primer paso. Para ello:

1. Presiona Windows + X y elige la opción Administrador de dispositivos.
2. Expande la sección Unidades de disco.
3. Busca tu disco (puede aparecer como «Desconocido» o con un icono de advertencia).
4. Haz clic derecho y selecciona Actualizar controlador.
5. Elige Buscar automáticamente controladores actualizados.

Si esto no funciona, haz clic derecho sobre el disco y selecciona Eliminar dispositivo. Después, reinicia el ordenador para que Windows reinstale el controlador de forma automática. Otra alternativa consiste en descargar manualmente el controlador del disco desde el sitio del fabricante e instalarlo desde el Administrador de dispositivos.

Verifica si hay conflictos de energía o configuración de ahorro

Si el disco duro no aparece en el Explorador de archivos de Windows 10 después de todo esto, intentemos con algo más. En ocasiones, Windows desactiva dispositivos USB como mecanismo para ahorrar energía, impidiendo que el equipo reconozca las unidades que se conecten. Si esta es la causa, puedes remediarlo así:

1. Ve a Administrador de dispositivos.
2. Expande Controladoras de USB o Unidades de disco.
3. Haz clic derecho en el dispositivo afectado y elige Propiedades – pestaña Administración de energía.
4. Finalmente, desmarca la opción Permitir que el equipo apague este dispositivo para ahorrar energía.

Nada funciona: el disco duro no aparece en el Explorador de archivos

Cuando nada funciona y el disco duro no aparece en el Explorador de archivos ni por ningún lado, seguramente es porque está defectuoso. Para salir de dudas, puedes entrar a la BIOS/UEFI y ver si esta lo reconoce. Si tampoco aparece allí, quizá presente un problema físico grave. En estos casos, tal vez necesites utilizar un software de recuperación, como Recuva, TestDisk o Stellar Data Recovery para rescatar los archivos que tengas en el disco.

Por otro lado, la mayoría de los casos de discos invisibles se resuelven aplicando ajustes en el sistema de Windows. El objetivo es hacer que la unidad sea reconocible y que pueda verse desde el Explorador de archivos. Esperamos que las soluciones propuestas te permitan recuperar el acceso a tu disco.