- OpenAI lanzará un nuevo modelo de lenguaje 'open-weight' con razonamiento avanzado.
- Permitirá su ejecución local y cierto nivel de personalización, aunque no será de código abierto completo.
- Altman reconoce un cambio de estrategia en la empresa, ante la presión de competidores como Meta y DeepSeek.
- OpenAI organizará eventos globales para obtener feedback de la comunidad antes del lanzamiento.
OpenAI, la empresa detrás de populares desarrollos en inteligencia artificial como ChatGPT, ha confirmado que trabaja en el lanzamiento de un nuevo modelo de lenguaje que marcará un punto de inflexión importante en su política de apertura tecnológica. Este modelo, calificado como “open-weight”, incluirá capacidades avanzadas de razonamiento y podrá ejecutarse en dispositivos locales, lo que supone un importante paso hacia una mayor descentralización del uso de la IA.
Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, explicó que este movimiento representa un cambio relevante respecto al enfoque cerrado que la compañía ha mantenido en los últimos años. Aunque no se trata de un modelo completamente de código abierto, sí permitirá a desarrolladores trabajar directamente con los pesos entrenados de la red neuronal, facilitando su adaptación a distintas necesidades sin exponer detalles internos sensibles como los conjuntos de datos o la arquitectura completa.
Un nuevo modelo más accesible, pero no completamente abierto
El modelo open-weight que prepara OpenAI será el primero con estas características que la compañía lanza desde GPT-2 en 2019. A diferencia de aquel experimento inicial, el nuevo modelo promete capacidades avanzadas de razonamiento, comparables a las del modelo o3-mini también de OpenAI, consolidándose como la propuesta de mayor rendimiento dentro del universo de modelos semiabiertos.
En términos prácticos, ofrecerá una apertura intermedia: los desarrolladores podrán descargar los pesos, ajustarlos (‘fine-tuning’) e integrarlos en soluciones propias, pero sin acceso a los datos originales de entrenamiento ni la estructura técnica interna. Esto asegura control sobre su uso, mientras permite cierta flexibilidad y colaboración.
La decisión se produce en un contexto de creciente presión competitiva. Modelos como Llama de Meta o Gemma de Google han ganado peso en el ecosistema gracias a un planteamiento más abierto. De hecho, OpenAI reconoce que durante años ha mantenido una postura demasiado cerrada, algo que Altman ha calificado como “estar en el lado equivocado de la historia”.
Escuchar a la comunidad: eventos para recopilar aportes
Con el objetivo de adaptar el nuevo modelo a las expectativas reales de los usuarios técnicos, OpenAI ha iniciado una ronda de colaboración directa con la comunidad. A través de un formulario de retroalimentación en su web, está solicitando opiniones sobre qué características gustaría ver implementadas en la nueva herramienta.
Además, la empresa tiene previsto desarrollar eventos presenciales de prueba y encuentro con desarrolladores. Las primeras sesiones tendrán lugar en San Francisco, para luego extenderse a ciudades de Europa y la región Asia-Pacífico. Estas reuniones permitirán mostrar prototipos iniciales y recoger sugerencias de mejora antes del lanzamiento oficial.
Steven Heidel, miembro del equipo técnico de OpenAI, confirmó que el modelo podrá ser ejecutado en hardware local. Este detalle es relevante, ya que elimina la dependencia exclusiva de servicios en la nube, dando paso a soluciones con mayor autonomía y privacidad.
Riesgos, control y marco ético de uso
El entusiasmo por los modelos más accesibles convive con preocupaciones en torno a su uso indebido. Investigadores y expertos en seguridad han advertido que herramientas tan potentes, al poder ser modificadas tras su publicación, podrían facilitar usos maliciosos.
Ante esto, miembros del equipo de seguridad de OpenAI, como Johannes Heidecke, han subrayado que el modelo pasará por un riguroso proceso de evaluación según el «Preparedness Framework» de la compañía. OpenAI asegura que no liberará ninguna versión que represente un riesgo catastrófico para la sociedad.
Además, podrían establecerse límites implícitos en la licencia de uso, restringiendo actividades como el análisis inverso (reverse engineering) o el uso en contextos sensibles de ciertos países. Por ahora, OpenAI no ha especificado detalles sobre la licencia bajo la que se distribuirá el modelo.
Una respuesta ante una industria cada vez más competitiva
El lanzamiento previsto del modelo open-weight llega en un momento en que la carrera por la supremacía de la inteligencia artificial se ha intensificado. DeepSeek, un laboratorio chino de IA, ha captado gran atención con su modelo R1, totalmente abierto y capaz de igualar o incluso superar a algunos modelos propietarios de OpenAI, a una fracción del coste habitual de desarrollo.
Asimismo, Meta con su familia Llama y Google con Gemma han consolidado propuestas en el ámbito open-source. Esto ha obligado a OpenAI a repensar su estrategia, apostando por una apertura parcial para no perder tracción frente a sus principales competidores.
A pesar de no haber revelado aún detalles técnicos como el número de parámetros del modelo, la ventana de contexto o los métodos de entrenamiento aplicados, Altman ha asegurado que se tratará de un modelo “muy competitivo en razonamiento”, lo que deja la puerta abierta a que pueda posicionarse por encima de otras alternativas abiertas existentes.
¿Qué es realmente un modelo open-weight?
En el mundo de la inteligencia artificial, un modelo “open-weight” es aquel que pone a disposición pública sus pesos entrenados. Estos pesos son los valores numéricos generados durante su proceso de entrenamiento y que permiten hacer predicciones o generar texto.
A diferencia de los modelos completamente abiertos que muestran también el código fuente, los datos de entrenamiento y la arquitectura, los modelos open-weight ofrecen menos transparencia, pero mayor usabilidad que los modelos cerrados accesibles solo mediante API.
Esto permite a los desarrolladores personalizar modelos existentes sin partir desde cero, logrando adaptaciones específicas a costes menores. También facilita la ejecución local, lo cual es especialmente útil para empresas o gobiernos que requieren mayor privacidad.
Mirando hacia adelante: el modelo como punto de inflexión
Con esta iniciativa, OpenAI no solo busca competir técnicamente, sino también reconstruir puentes con una comunidad de desarrolladores que valora la colaboración, la apertura y la autonomía tecnológica.
No hay aún una fecha oficial para su lanzamiento, pero se espera que ocurra en algún momento del segundo semestre de 2025. Mientras tanto, las pruebas, eventos y recopilación de opiniones marcarán el rumbo de lo que podría ser una de las apuestas más ambiciosas de OpenAI desde sus inicios.
Aunque no se trata de una apertura total, la decisión de liberar un modelo open-weight con capacidades de razonamiento avanzadas representa un giro estratégico importante para OpenAI. En un entorno cada vez más competitivo y con modelos cada vez más abiertos, esta jugada busca posicionar a la compañía en un terreno intermedio entre el control absoluto y la transparencia, manteniendo el liderazgo sin perder el contacto con la comunidad técnica global.
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