La autentificación biométrica se abre paso cada día con más fuerza como método seguro para acceder a diferentes servicios y dispositivos. Microsoft también está trabajando en este aspecto a través de un sistema propio. Te explicamos qué es Windows Hello y para qué sirve.
Esta función se halla integrada en el sistema operativo Windows 10 y Windows 11. El usuario puede utilizarla para iniciar sesión de forma rápida y segura, sin necesidad de contraseñas. Todo esto es posible gracias al uso de tecnologías avanzadas para garantizar la identidad del usuario, como por ejemplo el reconocimiento facial o la huella digital.
La plataforma de reconocimiento biométrico de Windows fue lanzada el año pasado, aunque hasta la fecha solo ha sido adoptada por una pequeña parte de los usuarios. La razón principal es que las ventajas y características de Windows Hello siguen siendo aún poco conocidas. De ahí la importancia de artículos informativos como este.
Características de Windows Hello
Windows Hello es una función avanzada para iniciar sesión en Windows de una forma segura y más rápida. Sus características principales son las siguientes:
- Ofrece diversos métodos de autentificación: Reconocimiento facial a través de la cámara infrarroja del dispositivo, huella digital mediante lectores integrados o externos, PIN o código numérico como alternativa segura a una contraseña, etc.
- Es compatible con numerosos servicios y aplicaciones: Microsoft Edge, Office 365 y otros servicios online.
- Brinda un mayor grado de protección. El hecho de sustituir las contraseñas tradicionales por datos biométricos, que son más difíciles de comprometer, incrementa el nivel de seguridad. Además, hacer servir una tecnología de encriptación que almacena los datos biométricos localmente en el dispositivo, no en la nube.
- Permite el acceso sin contraseñas, para que la autenticación sea más cómoda y sencilla.
Windows Hello: Requisitos de uso
¿Qué necesitamos para poder usar Windows Hello en nuestros dispositivos? ¿Quién puede hacer uso de este sistema? Estos son los requisitos:
Lo primero que debemos saber es que está solamente disponible en Windows 10 y Windows 11. No sirve para versiones anteriores. Además, para poder empezar a utilizar esta versión es preciso activarla siguiendo la siguiente ruta: Configuración > Cuentas > Opciones de inicio de sesión para habilitar. Allí es donde podremos configurar Windows Hello.
No menos importante es la cuestión del hardware compatible. Para utilizar Windows Hello necesitaremos disponer de algunos componentes específicos dependiendo de cuál sea el método de autentificación elegido:
- Cámara compatible con infrarrojos (IR) para el reconocimiento facial.
- Lector de huellas dactilares, ya sea integrado o externo.
- Módulo de plataforma segura (TPM) a través del cual gestionar la encriptación y proteger los datos de autenticación.
Muchas ventajas (y algún que otro inconveniente)
De las características mencionadas en el apartado de características, se puede deducir que el uso de Windows Hello supone innegables ventajas para cualquier usuario del sistema operativo de Microsoft. Básicamente, podríamos resumirlas en los siguientes puntos:
- Más comodidad, puesto que esta función hace posible un inicio de sesión rápido y sin necesidad de almacenar o recordar contraseñas. Aparte de esto, hay que destacar su perfecta integración con todos los dispositivos y servicios de Microsoft.
- Más seguridad. Se prescinde de contraseñas, que siempre son susceptibles de ser robadas o desencriptada, lo que es imposible que suceda con los datos biométricos, únicos para cada usuario. Pero por si eso no fuera suficiente, también esos datos se guardan de forma local, minimizando el riesgo de filtraciones.
- Más personalización. Esta forma de interactuar con el dispositivo es más ágil y directa. Y cuando se trata de dispositivos compartidos, cada usuario puede elegir su propio método biométrico o PIN para iniciar sesión.
A pesar de todas estas ventajas, hay que señalar algunos aspectos de Windows Hello no tan positivos. Son los puntos que explican que este sistema todavía no haya sido adoptado por la gran mayoría de los usuarios hasta la fecha.
Por una parte, está la cuestión de la confianza. Que los datos biométricos privados sean recopilados (por mucha seguridad que exista) genera ciertas dudas. Luego están las limitaciones de hardware, ya que no todos los dispositivos disponen cámaras IR o de lectores de huellas dactilares. Relacionado con esto último, hay que hacer alusión a los costes que implican adquirir el hardware compatible para poder usar Windows Hello.
¿Merece la pena usar Windows Hello?
Sin duda. Se trata de una función que facilita de forma considerable el acceso a nuestros dispositivos sin poner en juego la seguridad. La experiencia de uso es mil veces mejor que la que nos ofrecen los métodos de autenticación tradicionales. Además, supone una dosis extra de confianza cuando se trata de proteger nuestra información sensible, ya sea en un entorno profesional como en el ámbito personal.
Por todo ello, se puede afirmar que Windows Hello está destinada a convertirse en una herramienta esencial dentro del ecosistema de Windows, combinando las más avanzadas tecnologías de seguridad con un uso sencillo.
Redactor especializado en temas de tecnología e internet con más de diez años de experiencia en diferentes medios digitales. He trabajado como editor y creador de contenidos para empresas de comercio electrónico, comunicación, marketing online y publicidad. También he escrito en webs de economía, finanzas y otros sectores. Mi trabajo es también mi pasión. Ahora, a través de mis artículos en Tecnobits, intento explorar todas las novedades y nuevas oportunidades que el mundo de la tecnología nos ofrece día a día para mejorar nuestras vidas.