- Google destacará con una etiqueta a las apps que drenan batería y reducirá su visibilidad en Play Store.
- El umbral técnico fija más de 2 horas de wake locks no exentos en 24 horas y que ocurra en al menos el 5% de sesiones en 28 días.
- La medida, desarrollada junto a Samsung, entrará en vigor el 1 de marzo de 2026.
- También se contemplan wearables: uso excesivo si una app consume 4,44% de batería por hora en actividad.
Google ha puesto el foco en las apps que consumen mucha batería y lo hará visible directamente en Play Store. La tienda mostrará avisos en la ficha de aquellas aplicaciones con actividad anómala en segundo plano, de modo que cualquier usuario en España y Europa pueda identificar de un vistazo si una descarga puede disparar el gasto energético.
Además del aviso, estas aplicaciones perderán presencia en las secciones de descubrimiento y recomendaciones. Con este movimiento, que Google ha preparado en colaboración con Samsung, la eficiencia energética se convierte en un criterio clave de calidad a partir del 1 de marzo de 2026.
Qué cambia en Play Store
Play Store añadirá una advertencia visible en las páginas de apps que muestren un consumo elevado por su actividad en segundo plano. La notificación informará de que la app puede gastar más batería de lo habitual, ayudando a decidir si conviene instalarla o buscar alternativas más optimizadas.
Junto a la etiqueta, Google limitará la visibilidad de estas apps en listados destacados y recomendaciones personalizadas. La medida forma parte de las métricas de calidad técnica con las que la compañía ya evalúa cierres, errores y rendimiento general en Play Store.
El umbral y cómo se mide el consumo
La nueva referencia técnica considera excesiva una sesión cuando acumula más de dos horas de bloqueos de activación (wake locks) no exentos en un periodo de 24 horas. Los wake locks mantienen el dispositivo activo con la pantalla apagada y, si se abusan, drenan la batería con rapidez.
Para que una aplicación sea señalada, ese patrón debe repetirse en al menos el 5% de las sesiones de usuario durante los últimos 28 días. Así, no bastará con un pico puntual: el sistema busca comportamientos sostenidos que afecten a un volumen significativo de uso.
Hay casos justificados que quedan exentos, como la reproducción de audio o transferencias de datos iniciadas por el usuario. En cambio, un servicio que impida el reposo del sistema sin necesidad o que no libere correctamente los wake locks terminará penalizado.
En wearables también habrá control: se considerará consumo anómalo cuando una app de reloj agote alrededor del 4,44% de la batería por hora de actividad. Con ello, Google quiere proteger la autonomía limitada de los dispositivos de muñeca.
Impacto para usuarios y desarrolladores en España
Para los usuarios, la novedad supone más transparencia: antes de instalar una app en el móvil, se verá si tiene un historial de gasto energético elevado. Esto ayudará a evitar sorpresas y a priorizar aplicaciones que respeten el modo de suspensión del sistema.
Para los desarrolladores, Google enviará alertas de calidad y reducirá la visibilidad en Play Store si no se corrigen los patrones de consumo. Optimizar procesos en segundo plano y gestionar bien los wake locks será clave para mantener posicionamiento y descargas en la tienda.
El calendario es claro: la señalización pública y las penalizaciones de visibilidad comenzarán el 1 de marzo de 2026. Hasta entonces, la compañía continuará afinando esta métrica, que ya ha probado con apoyo de Samsung para ajustarla a escenarios reales.
Qué puedes hacer si ves el aviso de alto consumo
Si una app aparece con la etiqueta de consumo elevado, puedes optar por buscar una alternativa más eficiente, escribir al desarrollador para pedir mejoras o esperar una actualización que corrija el problema. Mientras tanto, conviene vigilar el uso en segundo plano desde los ajustes de batería del móvil.
Con esta política, Play Store aspira a que las apps más cuidadosas con el gasto energético tengan mayor protagonismo y que las que abusan de procesos en segundo plano se optimicen. La consecuencia práctica para la mayoría de usuarios será una experiencia más estable y autonomía más predecible en el día a día.
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