¿Tu disco se llena rápido? Guía completa para detectar archivos gigantes y ganar espacio

¿Tu disco se llena rápido sin motivo? Así puedes localizar archivos gigantes y borrarlos. Porque no estás solo: entre instalaciones, descargas y ficheros ocultos, el almacenamiento se evapora sin que nos demos cuenta. Con unas cuantas técnicas podrás detectar rápidamente los archivos gigantes, limpiar basura y recuperar decenas de gigas en minutos, sin romper nada importante.

En esta guía reunimos en un único sitio todo lo que necesitas: trucos del Explorador, comandos útiles, ajustes de Windows, herramientas fiables y medidas de prevención. Además, verás cómo abordar causas menos obvias (hibernación, puntos de restauración, Windows.old, paquetes de controladores, juegos enormes, duplicados o descargas olvidadas) y qué hacer si el problema persiste en Mac y Windows.

Localiza los archivos más pesados con el Explorador de Windows

El primer golpe de efecto para ganar espacio es identificar de un vistazo qué ocupa más. El Explorador permite filtrar y ordenar por tamaño sin instalar nada. Cambia a la vista ‘Detalles’ (cinta de opciones > Vista > Detalles) para ver la columna Tamaño; si no aparece, actívala y luego haz clic en ‘Tamaño’ para ordenar. La primera pulsación ordena de menor a mayor; la segunda, de mayor a menor.

También puedes usar filtros de búsqueda por rangos predefinidos. En el cuadro de búsqueda (arriba a la derecha) escribe ‘tamaño’ y elige categorías como Grande, Enorme o Gigantesco. Si prefieres precisión quirúrgica, usa un filtro manual como: tamaño:>600MB. El Explorador listará solo los ficheros que superen esa cifra, ideal para cazar vídeos, ISOs, copias y descargas enormes.

Recuerda posicionarte en la unidad o carpeta adecuada antes de buscar. Si tu disco C: es el afectado, ejecuta la búsqueda desde ‘Este equipo > Windows (C:)’. Con esto verás dónde se concentran los gigantes y podrás mover, comprimir o eliminar lo prescindible.

Si Windows no deja ordenar por tamaño es porque estás en vista de iconos. Cambia a ‘Detalles’ y vuelve a pulsar en la cabecera ‘Tamaño’. En carpetas largas, ordenar así permite detectar al vuelo los elementos que más espacio malgastan.

Listados por tamaño desde la consola (Símbolo del sistema)

Para listados masivos, la consola es tu aliada. El comando dir permite ordenar por tamaño y, si quieres, volcar el resultado a un archivo de texto para analizarlo con comodidad. Usa esta combinación para ver de menor a mayor tamaño en la consola:

dir /os

Si la lista es muy larga, mejor crea un informe en texto con los mismos criterios de ordenación: lo abrirás en Excel u otra hoja de cálculo y podrás filtrar al detalle.

dir /os > listado.txt

El fichero ‘listado.txt’ se guardará en la carpeta desde la que ejecutes el comando. Desde ahí podrás localizar rutas, nombres y tamaños, y decidir si mueves esos archivos a un disco externo o los eliminas (si no son del sistema).

Usa Configuración > Sistema > Almacenamiento para ver qué se come el disco

Windows 10/11 ofrece una vista clara por categorías: Escritorio, Aplicaciones y características, Archivos temporales, Imágenes, etc. Entra con Win + I > Sistema > Almacenamiento y revisa la unidad C:. Al pulsar en cada bloque verás su detalle; por ejemplo, en ‘Aplicaciones y características’ puedes ordenar por tamaño y desinstalar lo que ya no uses.

Ojo con los juegos: muchos se instalan mediante lanzadores (Steam, Epic, Ubisoft, GOG) y su peso real no siempre aparece en esta lista. En esos casos abre el cliente correspondiente para comprobar el tamaño y valorar desinstalar o mover la biblioteca a otra unidad.

En ‘Archivos temporales’ encontrarás caches, restos de actualizaciones y ficheros de instalación viejos. Aquí puedes recuperar varios gigas de una sola tacada sin tocar tus documentos.

Activa el Sensor de almacenamiento y automatiza la limpieza

El ‘Sensor de almacenamiento’ elimina automáticamente archivos temporales, vacía la papelera, limpia la carpeta Descargas según antigüedad y puede deshacerse de copias locales de ficheros sincronizados con la nube (OneDrive, iCloud, Google Drive) cuando no se abren en el periodo indicado. Es una forma preventiva y desatendida de mantener el disco a raya.

Ve a Inicio > Configuración > Sistema > Almacenamiento y activa Sensor de almacenamiento. Entra en su configuración y define la frecuencia (diaria, semanal o mensual), el criterio para vaciar la papelera y el tiempo para limpiar Descargas (de 1 a 60 días). Si vas justo de espacio, prográmalo para que corra a menudo.

Este sistema también te libra de las caches de apps y datos temporales que, si se acumulan, afectan al rendimiento. Configurado correctamente, te evita la típica sorpresa de que el disco reviente de la noche a la mañana.

Juegos: los grandes culpables (y cómo domarlos)

Los títulos actuales ocupan decenas o incluso más de 100 GB. Si tienes varios instalados, el espacio vuela. Empieza por desinstalar lo que ya no juegas o lo que sabes que no tocarás en semanas; podrás bajarlo de nuevo cuando quieras.

Alternativa: instala la biblioteca de Steam/Epic en una unidad externa o en un segundo disco interno. Steam permite mover juegos de una unidad a otra sin reinstalar; el proceso es bastante rápido en SSD y te libera la unidad del sistema.

Herramientas de terceros para mapear el disco

Cuando necesitas ver el uso del almacenamiento por carpetas y tipos, los analizadores visuales son oro. Estas utilidades escanean y devuelven un mapa de qué está ocupando qué, con vistas por árbol, gráficos y acciones directas (abrir, eliminar, mover).

TreeSize

TreeSize ofrece una visión rápida y ordenada por carpetas, mostrando porcentajes y tamaños acumulados. Es gratuito, fácil de usar y muy conocido. Al principio su interfaz puede abrumar, pero tras unos minutos se vuelve muy intuitivo. Incluye varios modos de visualización para entender mejor dónde se te va el espacio.

Pros: gratuito, potente, múltiples vistas, ideal para usuarios de cualquier nivel. Contras: para algunos, muestra demasiada información que no siempre necesitas para una limpieza básica.

WinDirStat

WinDirStat genera un treemap de colores por tipo de archivo, fantástico para localizar de un vistazo bloques gigantes (por ejemplo, un MKV o un ISO). Es gratuito y muy gráfico: al clicar en un rectángulo saltas a la ruta exacta del archivo.

Pros: vista visual potentísima, interfaz comprensible tras un pequeño periodo de adaptación. Contras: usuarios avanzados pueden echar en falta funciones extra, y la primera impresión puede abrumar.

SpaceSniffer

Portable, gratuito y muy ligero. Usa un mapa de árbol fácil de leer y permite profundizar carpeta a carpeta con distintos niveles de detalle. Ideal si buscas rapidez sin instalación.

Pros: portable, sencillo, enfoque textual/visual claro. Contras: su interfaz es sobria y algunos botones son poco expresivos; a ciertos usuarios les puede costar más interpretar la información si prefieren gráficos muy vistosos.

Trucos que liberan varios gigas de golpe

No todo es borrar fotos y vídeos. Windows genera y acumula archivos del sistema que es seguro limpiar si sabes dónde tocar. Aquí tienes los más eficaces para ganar espacio rápido.

Vacía la Papelera de reciclaje

Hasta que no vacías la papelera, nada desaparece. Abre la Papelera, revisa y pulsa ‘Vaciar papelera’. Si la tenías llena, puedes recuperar un buen pellizco de almacenamiento en segundos.

Usa el Liberador de espacio/Limpieza de disco

Busca ‘Liberar espacio’ en el menú Inicio y abre la herramienta. Marca elementos como ‘Archivos temporales’, ‘Archivos de registro’, ‘Instalaciones anteriores de Windows’ (si procede) y pulsa ‘Limpiar archivos del sistema’ para ver aún más opciones. El proceso puede tardar, pero a menudo libera varios GB.

Borra las actualizaciones antiguas de Windows y Windows.old

Tras actualizar de versión queda la carpeta Windows.old y restos de actualizaciones que ocupan mucho. Con ‘Limpieza de disco’ (modo ‘Limpiar archivos del sistema’) marca ‘Limpieza de actualizaciones de Windows’ y confirma. Si actualizaste desde una versión anterior, elimina Windows.old desde esta misma utilidad para no dejar 20 GB bloqueados.

Elimina versiones obsoletas de drivers

En ‘Limpieza de disco’, marca ‘Paquetes de controladores de dispositivos’ para quitar controladores antiguos que ya no usas. Es espacio que suele pasar desapercibido y que puedes recuperar sin riesgo.

Desactiva la hibernación (si no la usas)

La hibernación crea el fichero hiberfil.sys con un tamaño cercano a tu RAM (16 GB de RAM ≈ 16 GB ocupados). Si no la utilizas, desactívala abriendo ‘Símbolo del sistema’ como administrador y ejecutando:

powercfg /h off

Con esto eliminarás hiberfil.sys y ganarás esos gigas de una tacada. Si algún día la necesitas, podrás reactivarla con powercfg /h on, recuperando la funcionalidad original.

Memoria virtual (pagefile): desactivar o reducir con cabeza

El archivo pagefile.sys actúa como memoria de intercambio en disco. Si tienes mucha RAM, puedes reducirlo o moverlo a otra unidad; desactivarlo por completo solo es recomendable si cuentas con 16 GB como mínimo (32 GB en equipos profesionales) y sabes lo que haces.

Con menos de 16 GB desactivarlo puede provocar avisos de memoria insuficiente, cierres de apps, congelaciones o incluso pantallazos azules. Alternativas sensatas: fija un tamaño más pequeño, muévelo a otra unidad o limpia temporales y puntos de restauración antes de tocarlo.

Ruta: Panel de control > Sistema > Configuración avanzada del sistema > Rendimiento > Configuración > Opciones avanzadas > Memoria virtual > Cambiar. Ahí podrás ajustar un tamaño fijo menor, activar ‘Sin archivo de paginación’ (con mucha RAM) o moverlo a otra unidad.

Mueve multimedia a un disco externo o a la nube

Fotos y vídeos son devoradores de espacio. Si no los necesitas a diario, pásalos a un disco USB o súbelos a la nube (OneDrive, Google Drive, iCloud). Activa la sincronización selectiva para mantener accesos directos y liberar el almacenamiento local. Asegúrate de que se han subido antes de borrar nada.

Comprime lo que no usas a menudo

Comprimir archivos grandes que tocas de tarde en tarde (ZIP) libera espacio y facilita copias de seguridad y envíos. En Windows: botón derecho > Enviar a > Carpeta comprimida. En Mac: Finder > clic derecho > Comprimir. Ten en cuenta que para usarlos tendrás que descomprimirlos.

Desinstala apps y limpia el Escritorio y Descargas

En Windows: Inicio > Configuración > Aplicaciones > Aplicaciones y características; ordena por tamaño y desinstala lo que no uses. El Escritorio atestado y la carpeta Descargas suelen acumular ficheros enormes: organiza, mueve a Documentos/Vídeos/Imágenes y borra lo innecesario.

Elimina cuentas de usuario que no utilizas

Cada perfil guarda su propia biblioteca de archivos. Si ya no se usa, bórralo desde Configuración > Cuentas > Familia y otros usuarios > Quitar (elige ‘Eliminar cuenta y datos’). Puedes recuperar varios gigas según el caso.

Duplicados y temporales: cómo limpiar seguro

Además de la limpieza del sistema, conviene eliminar archivos temporales de apps y caches del navegador, y localizar duplicados. Hazlo con cabeza para no borrar datos activos.

Temporales en Windows

Revisa procesos activos (Ctrl + Mayús + Esc > pestaña Procesos) y cierra lo que no necesites. Abre ‘Ejecutar’ (Win + R), escribe temp y borra el contenido que no esté en uso. Después vacía la papelera. Para caches del navegador, usa la opción Borrar caché en su configuración.

Temporales en Mac

En Finder > Ir > Ir a la carpeta, escribe ~/Biblioteca/Caches/, abre cada carpeta y manda a la papelera lo prescindible. Vacía la papelera para recuperar espacio. Igual que en Windows, limpia la caché del navegador desde su menú.

Duplicados

Manualmente, en Windows usa Vista > Detalles y ordena por Nombre/Tamaño; en Mac, Visualización > Mostrar opciones de visualización > Ordenar por. Si la tarea es enorme, recurre a un buscador de duplicados de confianza para evitar errores.

Más herramientas que te facilitan la vida

Si prefieres un todo-en-uno, existen suites como Avast Cleanup que automatizan tareas: limpian cachés, eliminan bloatware, detectan duplicados y optimizan el arranque. También hay utilidades enfocadas a compresión como Bandizip, ligera y sencilla, que te ayudan a empaquetar archivos grandes en pocos clics.

Gestiona y amplía la unidad C: sin perder datos

Si el origen del problema es que la partición C: nació pequeña, puedes ampliarla. Antes de tocar particiones, haz copia de seguridad del sistema y datos importantes con tu herramienta preferida. Así, si algo falla, podrás volver atrás sin dramas.

Con espacio no asignado contiguo: selecciona C:, elige ‘Redimensionar/Mover’ en tu gestor de particiones y arrastra el borde para absorber el espacio libre. Aplica cambios y espera a que termine. C: crecerá sin perder información.

Sin espacio no asignado: algunos gestores permiten ‘Asignar espacio’ desde otra partición con margen, trasladándolo a C:. Selecciona la partición donante, indica cuánto ceder y aplica. El software moverá datos y ajustará las tablas de partición automáticamente.

Recuerda ejecutar un antivirus si sospechas de malware y, si vas a limpiar a fondo, prepara primero la copia de seguridad del sistema. Una limpieza agresiva sin backup puede salirte cara si borras lo que no debes. Si aún así quieres seguir limpiando te contamos más aquí: Cómo reemplazar la unidad C en Windows 10

Comprueba el espacio en disco en Windows y Mac

Antes de entrar a saco, conviene ver el estado general del almacenamiento. En Windows, abre el Explorador, entra en ‘Este PC’ y mira ‘Dispositivos y unidades’. En Mac, ve a menú Apple > Ajustes del Sistema > General > Almacenamiento para ver el desglose por categorías y espacio libre.

Prevención: evita que vuelva a pasar

Programa el Sensor de almacenamiento (limpieza automática), revisa cada mes Descargas, Imágenes, Vídeos y Escritorio, y activa alertas si tu equipo lo permite para avisar cuando bajes del 10–15% de espacio libre. Mantén la papelera a raya y no acumules instaladores que ya no necesitas.

Sincroniza con la nube usando ‘archivos bajo demanda’ y usa discos externos para bibliotecas pesadas (vídeo, música, fotos, juegos). Dedica 10 minutos cada dos meses a un repaso rápido con TreeSize o WinDirStat para detectar a tiempo carpetas desbocadas.

Con estas técnicas combinadas podrás identificar en minutos qué ocupa tanto, aplicar limpiezas con seguridad y automatizar el mantenimiento. Entre el filtro por tamaño del Explorador, el Sensor de almacenamiento, la eliminación de restos del sistema (Windows.old, actualizaciones, drivers antiguos), y los mapas de disco de TreeSize/WinDirStat/SpaceSniffer, recuperarás decenas de gigas y mantendrás el PC en forma sin esfuerzo.