¿Sabías que puedes cambiar el formato de un vídeo con VLC? El reproductor de vídeo más popular del planeta es toda una caja de sorpresas. Entre sus funciones adicionales está la de convertir archivos multimedia de un formato a otro, rápido y sin complicaciones. Y como VLC es multiplataforma, puedes aprovechar esta funcionalidad en un PC con Windows, macOS y Linux.
En esta entrada vamos a explicar cómo cambiar el formato de un vídeo con VLC paso a paso. El proceso es tan sencillo como efectivo, lo que ahorra la tarea de descargar programas de edición multimedia complicados. Esta solución es ideal para todo tipo de usuarios, y muy útil para hacer un vídeo compatible con otros dispositivos y plataformas.
Cómo cambiar el formato de un vídeo con VLC paso a paso
Supongamos que descargas un vídeo en tu ordenador y quieres cambiarle el formato para que sea compatible con el móvil, por ejemplo. Si tienes VLC Media Player instalado en tu ordenador, no hace falta nada más. Este popular reproductor multimedia no solo reproduce de todo, sino que también te permite cambiar el formato de los vídeos.
Y si aún no lo has instalado en tu equipo, no hay razón para demorar más. Aunque es verdad que Windows, macOS y Linux cuentan con reproductores multimedia nativos, nada mejor que VLC. Además de ser compatible con estos sistemas operativos, VLC reproduce todo tipo de formatos de vídeo, no tiene anuncios y puedes descargarlo gratis desde su sitio web.
Una vez descargado e instalado, veamos cómo cambiar el formato de un vídeo con VLC en tu ordenador. El proceso puede dividirse en cuatro pasos sencillos: acceder a la opción de conversión, elegir el formato de salida, configurar otros ajustes y finalmente, elegir el destino y convertir. A continuación, detallamos cada paso para que puedas hacerlo sin ningún contratiempo.
Paso 1: Accede a la herramienta de conversión
Lo primero que tienes que hacer para cambiar el formato de vídeo con VLC es encontrar la opción para convertir en el reproductor VLC Media Player. Para ello, abre el programa y haz clic en el menú Medio que está en la esquina superior izquierda del reproductor. Se abrirá un apartado con diferentes opciones, entre las que debes seleccionar Convertir. Obtienes el mismo resultado si utilizas el atajo de teclado Ctrl + R.
En la ventana emergente, debes hacer clic en el botón Añadir para seleccionar el vídeo que quieres convertir. Si es un vídeo que has bajado de Internet, estará en la carpeta de Descargas. Elige el vídeo desde su ubicación y haz clic en Abrir para que se cargue a la lista de archivos seleccionados.
Un plus de esta herramienta es que puedes elegir varios vídeos y cargarlos a la lista para convertirlos todos en un mismo intento. Una vez que has añadido el o los vídeos a la lista, solo tienes que hacer clic en el botón Convertir/Guardar para pasar al siguiente paso.
Paso 2: Elige el formato de salida
Seguidamente, se abrirá la ventana emergente Convertir, desde donde puedes elegir el formato de salida que le darás a tu vídeo. Acá también hay otras opciones de configuración orientadas a usuarios expertos y de las que hablaremos en el siguiente paso. Pero si prefieres hacerlo más sencillo, puedes dejar todo como está y solo seleccionar el formato de salida, tal como se explica a continuación.
En la sección Preferencias de la ventana Convertir verás otra sección llamada Perfil y una barra con una flecha hacia abajo. Clica en ella para que se abra el listado de formatos disponibles a los que puedes convertir el vídeo seleccionado. Hay varias opciones, como el formato MP3 (solo audio), formatos compatibles para dispositivos Android y YouTube y distintos formatos de vídeo (MP4, Webm, OGG, etc.).
Además, puedes editar el perfil seleccionado haciendo clic en el botón de ajustes que está justo al lado (tiene un icono de llave). Se abrirá otra ventana emergente con varias pestañas, la primera de las cuales se llama Encapsulamiento. Aquí puedes elegir entre 15 formatos multimedia diferentes, siendo los más conocidos MPEG-PS, MKV, AVI, MP3, WAV y otros más. Hasta aquí, cambiar el formato de un vídeo con VLC es pan comido para la mayoría de usuarios. Pero, si eres experto, puedes aplicar ajustes adicionales como los siguientes.
Paso 3: Configura los parámetros de salida (opcional)
Al cambiar el formato de un vídeo con VLC verás varias opciones de configuración adicionales en el botón de ajustes. Además de la pestaña Encapsulamiento, verás tres más: Códec de vídeo, códec de audio y Subtítulos. En cada una hay más opciones para especificar los parámetros de salida del vídeo antes de convertirlo definitivamente.
Por ejemplo, puedes ajustar detalles como la resolución y filtros, y establecer un mayor equilibrio entre la calidad y el tamaño del archivo. También es posible reducir la resolución del vídeo si lo que buscas es ahorrar más espacio, llevándolo de 1920×1080 a 1280×720, por ejemplo. Si tienes conocimientos de edición de vídeo, entenderás muy bien qué opciones marcar y cuáles dejar tal como están.
En caso de que no seas experto en la materia, lo mejor es que dejes todos estos valores sin modificar. De esta manera te aseguras de que cambiar el formato de un vídeo con VLC sin que el resultado final presente problemas. Una vez que todos los detalles han sido configurados a tu gusto, es momento de elegir el destino del nuevo archivo y convertir.
Paso 4: Elige el destino y convierte el vídeo
Al final de la ventana Convertir verás la sección Destino, con una pestaña desde donde puedes elegir la ubicación local en la que se guardará el archivo multimedia resultante. Selecciona el destino, haz clic en el botón Iniciar y espera a que finalice la barra de progreso en VLC. Una vez termine, no dará ningún aviso, pero puedes buscar el vídeo convertido en la ubicación que seleccionaste.
Y de esta manera, has podido cambiar el formato de un vídeo con VLC. Puedes valerte de este recurso para convertir un vídeo pesado a un formato más ligero que ocupe menos espacio. También es útil si quieres convertir un archivo de vídeo en otro de audio, o pasarlo a un formato compatible con dispositivos móviles. Y por si te interesa, ya hemos explicado cómo hacer que VLC sea el reproductor predeterminado en Windows 11.
Desde muy joven he sentido una gran curiosidad por todo lo relacionado con los avances científicos y tecnológicos, en especial aquellos que nos hacen la vida más fácil y entretenida. Me encanta estar al tanto de las últimas novedades y tendencias, y compartir mis experiencias, opiniones y consejos sobre los equipos y gadgets que uso. Esto me llevó a convertirme en redactor web hace poco más de cinco años, enfocado principalmente a los dispositivos Android y sistemas operativos Windows. He aprendido a explicar con palabras simples aquello que resulta complicado para que mis lectores puedan entenderlo fácilmente.